El día de ayer, jueves 21 de diciembre, se registró un ataque de armado contra personas que se encontraban al interior de la Universidad Carolina de Praga en República Checa que dejó a 14 personas sin vida y al menos 25 heridos, que según medios y autoridades locales, se trata del tiroteo más mortífero al que al país se ha enfrentado en décadas.
El jefe de la Policía de Praga, Petr Matějček, informó este viernes que el atacante se suicidó luego de los acontecimientos y se trataba de un joven de 24 años que pertenecía a la Facultad de Artes de dicha institución.
Aún no ha sido identificado formalmente debido a la gravedad de sus heridas, por lo que las autoridades no lo han nombrado. También se encuentran investigando el motivo del ataque.
Al escuchar las detonaciones, alumnos procedieron a esconderse dentro y fuera del inmueble, con barricadas en las puertas de las aulas para evitar que el agresor ingresara a las mismas. Una imagen que circuló en redes sociales mostraba a varios estudiantes en una cornisa exterior en lo alto de un edificio.
El autor es culpado por más crímenes
Las autoridades locales dieron a conocer que buscaban al sospechoso por otro crimen, cometido en la víspera en la localidad de Hostoun, 35 kilómetros al este de Praga.
También se menciona que pudo haber sido el autor de otro doble asesinato, en el que un padre de 32 años y su bebe de meses fueron privados de la vida en un bosque cerca de Praga el pasado 15 de diciembre.
Además, antes del ataque en la universidad, las autoridades habrían sido alertadas sobre que viajaba a Praga con la intención de quitarse la vida y poco después, recibieron información de que se había localizado a un hombre fallecido en Hostouň, una ciudad a unos 21 kilómetros al oeste de Praga. Se cree que el hombre es el padre del atacante.
Hasta el momento, se sigue trabajando para dar con más información sobre el atacante y sus motivaciones. Por ahora, se ha anunciado un día de luto por las víctimas mortales, que se llevará a cabo el día sábado.