Aunque no está claro cuándo y por qué algunos creyentes comenzaron a conmemorar la Navidad, los documentos antiguos sugieren que la iglesia romana comenzó a celebrar formalmente esta tradición el 25 de diciembre del año 336, durante el reinado del emperador Constantino.
De acuerdo con la revista National Geographic, el origen de esta festividad guarda similitudes con las Saturnales, es decir, las fiestas paganas que celebraban los romanos en honor a Saturno (dios de la agricultura y la cosecha) y que originalmente transcurrían entre el 17 y el 23 de diciembre, coincidiendo con el solsticio de invierno.
De hecho, los romanos, como ocurre hoy en día, visitaban a sus familiares y amigos para intercambiar regalos y celebrar grandes banquetes públicos. Durante estas fiestas, que duraban cerca de siete días, los esclavos podían vestir las ropas de sus señores y ser atendidos sin recibir ningún castigo.
Otra de las creencias es que los romanos celebraban el 25 de diciembre la fiesta del "Natalis Solis Invicti", asociada al nacimiento de Apolo, considerado el dios del sol. A su vez, se tomó la idea del 25 de diciembre como fecha del nacimiento de Jesucristo.
ORIGEN DE LA PALABRA
Navidad proviene de la palabra latina nativitas que significa nacimiento y se refiere particularmente al nacimiento de Cristo, el cual se celebra cada 25 de diciembre. Sin embargo, en ninguna parte de la Biblia se menciona la fecha exacta del nacimiento de Jesús.
300 AÑOS DESPUÉS
La fiesta de Navidad fue reconocida 300 años después de la muerte de Jesucristo, cuando el emperador Constantino permitió el cristianismo en el Imperio romano. Por consiguiente, la celebración ganó popularidad entre los romanos cristianos al tratarse de la fecha del "renacimiento" del Dios Sol.
LA REPRESENTACIÓN DE BELÉN
¿Sabías que la primera representación del Belén, que escenificaba el nacimiento de Cristo, la realizó San Francisco de Asís en la Nochebuena de 1223? Así es, dicha representación se llevó a cabo en una cueva próxima a la ermita de Greccio, en Italia.