La llegada del año nuevo sorprendió a Japón con un gran terremoto que desencadenó alerta de tsunami, cientos de personas sin vida, múltiples desaparecidos, daños en inmuebles y contantes sismos en toda la isla.
Este terremoto tuvo una magnitud de 7.5 a unos 42 kilómetros al noreste de Anamizu en la prefectura de Ishikawa y según el Servicio Geológico de Estados Unidos, las réplicas de este incidente podrían durar meses y podían ser de magnitud superior a 6.
¿Por qué hay tantos sismos en Japón?
El país asiático es considerado como una de las zonas con mayor actividad sísmica alrededor del mundo por lo que es común que se susciten estos fenómenos en consecuencia.
De acuerdo con la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), la ubicación geológica de Japón se llama "Anillo de Fuego" o "Cinturón de Fuego" y este se encuentra ubicado en las costas del Océano Pacífico, el cual concentra algunas de las zonas de subducción más relevantes del mundo, ocasionando intensa actividad sísmica y volcánica en dicho territorio.
El Servicio Geológico Mexicano (SGM) indica que una zona subducción se trata de aquella en donde dos placas tectónicas chocan por moverse en direcciones opuestas. De estas dos placas, la más densa pasa por debajo de la menos densa, es decir, se subduce y este movimiento produce choques entre ambas placas y libera energía y por ende, sismos.
Además, las zonas de subducción como las que rodean Japón están compuestas de dos placas océanicas que, al chocar, además de sismos y actividad volcánica, también forman huecos en suelo del océano que son denominados como "fosas" o "trincheras oceánicas", ocasionando que año con año se reporten múltiples sismos.