Durante dos horas estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, así como padres de los 43 desaparecidos, cerraron la salida sur de Chilpancingo que conecta con el puerto de Acapulco.
Los estudiantes llegaron a bordo de tres autobuses, mismos que ocuparon para cerrar la vialidad de la Autopista del Sol a la altura del punto conocido como el Parador de Marqués.
Mientras que un grupo de al menos 100 alumnos con el rostro cubierto, entregaban volantes a los automovilistas.
Personal de la Secretaría de Gobernación informó, tras una mesa de diálogo con los jóvenes, que les solicitaron su intervención para entablar una mesa de diálogo a nivel federal por el tema de los procesos de admisión a las normales rurales.
Fue así que, el abogado de los padres, Vidulfo Rosales Sierra, exigió al gobierno federal que abra los expedientes del Ejército Mexicano en torno a la desaparición de los jóvenes y la participación que tuvieron en estos hechos. Rosales Sierra también señaló que "El que nada debe, nada teme".
La manifestación en la carretera se registró pese a las advertencias que ha hecho en los últimos días el gobierno de Guerrero en torno a que no se permitirán más bloqueos carreteros y que de ser necesario se utilizará la fuerza pública para garantizar el libre tránsito de quienes utilizan las calles, avenidas o carreteras de la entidad.
Finalmente, luego de 2 horas los estudiantes se retiraron llevándose un camión de frituras hacia su escuela que se ubica en el municipio de Tixtla.
