La OCDE insta a México a adoptar reformas tributarias significativas, incluyendo la aplicación de un sistema impositivo más progresivo y la lucha contra la evasión fiscal, como estrategias fundamentales para impulsar el crecimiento económico y la productividad del país.
Alberto González Pandiella, del Departamento de Economía de la OCDE, destacó la necesidad de incrementar la recaudación fiscal para alcanzar la media de los países miembros, situada en un 34% del PIB, frente al 16-17% que registra México.
Comparando con países de la OCDE, México se encuentra por debajo del promedio en términos de recaudación tributaria. Este déficit limita su capacidad para invertir en áreas cruciales como la educación, la energía limpia y el manejo de recursos hídricos, aspectos esenciales para mejorar la productividad y el desarrollo económico.
González Pandiella señaló que más allá de atraer inversiones extranjeras, es fundamental implementar cambios estructurales que beneficien tanto a las empresas locales como a la población en general, promoviendo un ciclo virtuoso de crecimiento. Entre las recomendaciones de la OCDE figuran el fortalecimiento del Estado de derecho, la reducción de la corrupción y el impulso a la competencia.
Aunque estas reformas estructurales requieren tiempo para materializarse, el funcionario enfatizó en la importancia de iniciarlas lo antes posible, ya sea al comienzo de la administración o más adelante, para enviar señales positivas a los inversionistas. La OCDE subraya que el respeto al Estado de derecho y la lucha contra la corrupción son cruciales, no solo para mejorar la percepción del país, sino para permitir que las empresas inviertan en áreas más productivas en lugar de destinar recursos a combatir la corrupción y la inseguridad.