La madrugada del pasado lunes, se registró una masacre que cobró la vida de 6 personas, entre ellas una menor de 16 años y su hijo de 10 meses, así lo dio a conocer la Oficina del Sheriff del condado de Tulare, en la ciudad de Goshen, California, en Estados Unidos.
Al respecto, mediante un comunicado, la citada oficina informó que, tras una llamada de auxilio, recibida alrededor de las 3:30 horas del lunes, "la persona que informó pensó que había un atacante activo en el área debido a la cantidad de disparos que se estaban escuchando".
Tras acudir al lugar de los hechos, los elementos policiales, advirtieron que había 6 personas fallecidas en el domicilio del ataque, mismas que se encontraban dispersas en diversos puntos, señalando que se trataba de una familia conformada por un bebé de 10 meses, su madre, abuela y bisabuela, entre otros; además 3 personas resultaron sobrevivientes, luego de este lamentable hecho.
Posteriormente, la policía informó que se encontraba monitoreando las fronteras de México y Canadá, a efecto de localizar a algún sospechoso, pues dijo que estos homicidios son "similares a las ejecuciones de pandillas de alto rango, y el estilo de ejecución que cometen", lo anterior debido a que las personas fallecidas fueron "tiroteadas en lugares donde un atacante sabía que se daría una muerte rápida".
Son dos personas las sospechosas de esta tragedia, según el alguacil del condado de Tulare, quien calificó este hecho como "deliberado, intencional y horrible", sin embargo no fueron revelados los nombres de los mismos, pues de lo contrario, se pondría en alerta a los responsables de estos asesinatos, no obstante afirmó que ya cuentan con información sobre este caso.
