El pasado 07 de marzo de manera sorpresiva, seis mujeres jóvenes desaparecieron sin aparente rastro, cuando iban caminando juntas hacia la comunidad de San José Guanajuato en Celaya. Presuntamente habían sido interceptadas por un grupo criminal.
Sin embargo, el caso comenzó a causar conmoción entre los ciudadanos, cuando esa misma semana otras dos mujeres jóvenes se habían reportado como desaparecidas. Pero días después fueron localizadas con vida.
Se trata de Mariana Gutiérrez Guzmán de 19 años, Yoselín Daniela Zamorano Macías de 20, Sandra Daniela Paredes González de 24, Paulina Berenice Reséndiz Martínez de 25, Rosa María Ramírez Ayala de 42 y Gabriela Barbosa Ruiz de 48.
Pasaron los días y los familiares de las víctimas cuestionaban a la Fiscalía General de Guanajuato acerca del paradero, pero la autoridad de investigación únicamente se limitó a decir que las averiguaciones mantenían su curso.
A casi diez días de haberse reportado la desaparición, Carlos Zamarripa Aguirre, fiscal general de Guanajuato, en una entrevista con medios de comunicación brindo información relacionada con el caso.
En esa primera declaración, aseguró que tras una serie de cateos se estableció el posible paradero de las víctimas, “algunas de ellas sin vida” aseguró en el momento.
Este viernes, en una rueda de prensa, la Fiscalía General del Estado (FGE), confirmó el hallazgo de las mujeres desaparecidas. Detalló que fueron calcinadas por integrantes de una célula criminal de Tamaulipas.
Se trató de un operativo en Bajío donde fueron localizados los restos y mediante pruebas de genética, se ha logrado establecer la identidad de cinco de ellas. Sandra Daniela Paredes González de 24 años, no ha sido localizada.
Y es que lo que se encontró fueron restos óseos, que se encontraban severamente dañados por el fuego. Pero en medio de esta situación, un grupo de 12 hombres fueron detenidos, quienes en próximas horas se definirá su situación jurídica.