El titular de la Fiscalía General del Estado de Morelos, Uriel Carmona Gándara, señaló que pese a la polémica generada por el caso del obispo emérito Salvador Rangel Mendoza, lo importante es que no fue asesinado.
En entrevista el Fiscal de Morelos fue cuestionado sobre las hipótesis que se han generado por la desaparición y localización del representante de la Diócesis Chilpancingo – Chilapa, por lo que señaló que existe polémica en torno a la filtración de información y declaraciones de funcionarios públicos no hubo una muerte que lamentar.
“Generó alguna polémica ese tema, lo que hay que ver es que el señor está con vida y que no fue una víctima más de un homicidio, la fiscalía va a hacer lo que le toca, la policía estatal va a hacer lo que le toca si vamos a dar con los responsables”.
La pregunta expresa sobre la existencia de videos que servirían de prueba para confirmar la versión del secuestro, detalló que ya se encuentra en la carpeta de investigación pero que no serán difundidos.
“Hay material de video, entrevistas, entrevistas, de inspecciones en los sitios, pero parte de la carpeta el ministerio público tiene restringida esa información debe ser reservada”.
Por lo que exhortó a no generar más desinformación en el caso “No se debe generar más polémica, el tema es el secuestro pero hay que esperar el resultado oficial”.
La otra versión
El comisionado estatal de Seguridad Pública en el estado de Morelos, José Antonio Ortiz Guarneros, sostuvo la versión en donde el obispo emérito Salvador Rangel Mendoza no fue víctima de la privación de la vida, ya que no fue forzado a ingresar a un motel.
Asimismo, habló sobre la existencia de los videos de las cámaras de vigilancia del motel donde fue encontrado el representante de la Iglesia Católica, señaló que, la grabación muestra que no fue llevado contra su voluntad. Asimismo, estos videos ya fueron entregados por el gobierno a la Fiscalía.