Previo a la toma de protesta, que se tiene prevista para este próximo 1 de enero del 2023, del presidente electo Luiz Inácio Lula Da Silva, un explosivo fue desarmado el pasado sábado, en las cercanías del aeropuerto internacional de Brasilia, capital de Brasil.
La bomba, localizada al interior de un camión de combustible que se encontraba en un lugar cercano al citado aeropuerto, fue localizada y desarticulada por la policía militar de Brasil.
Por lo anterior, un hombre, presuntamente partidario de uno de los contendientes vencidos en la elección presidencial y actual mandatario de aquél país, Jair Bolsonaro, fue detenido luego de confesar que pretendía realizar el atentado.
Al respecto, Flavio Dino, designado como ministro de justicia para el gobierno entrante, señaló que “todos los procedimientos serán reevaluados, buscando el fortalecimiento de la seguridad. Y el combate a los terroristas y alborotadores será intensificado. La democracia ha ganado y vencerá”, afirmando que este 1 de enero, la toma de protesta del presidente "ocurrirá en paz".