La estrella del fútbol de Pumas de la Liga MX, capturado por la Unidad de Delitos Sexuales de la Policía, fue transportado en una patrulla hacia las instalaciones judiciales mientras el juez encargado del Juzgado Número 15 determinará las medidas a tomar.
Alves llegó temprano en la mañana a la comisaría acompañado de su abogado y escoltado por oficiales de policía.
Poco después de las diez, después de dar su declaración, fue llevado a la patrulla y trasladado al juzgado.
El incidente de presunta agresión sexual ocurrió en la madrugada del 30 al 31 de diciembre, cuando una mujer acusó al brasileño de abuso sexual, alegando que la tocó debajo de la ropa interior en una discoteca de Barcelona.
Los gerentes del lugar contactaron a la policía inmediatamente, y se activó el protocolo para estos casos. La policía tomó declaraciones de varios testigos y obtuvo imágenes de las cámaras de seguridad. La mujer presentó la denuncia contra Alves el 2 de enero, mientras él negó los hechos, afirmando en un programa de televisión que "no conozco a esta señorita, no la he visto en mi vida".